Por una Ciudad sin Corrupción. Más digna. Misionera CCVI y Colaboradoras de Pushaq Warmi (Perú) |
(Por Katty Huánuco) La compasión es un sentimiento fuerte que nos
saca de nosotras(os) mismas(os). De ahí nace nuestra capacidad de indignación, ante el
atropello de los derechos de los y las más vulnerables, y el coraje de disentir
ante lo injusto.
Sin duda, nosotras las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado, estamos llamadas a actualizar ese amor compasivo y misericordioso promoviendo la dignidad humana.
Lo sentimos así. Es nuestro llamado como CCVI. De hecho, no nos hace falta ir más allá que mirar nuestro propio entorno... nuestra ciudad, nuestro país, nuestros barrios...
Lo sentimos así. Es nuestro llamado como CCVI. De hecho, no nos hace falta ir más allá que mirar nuestro propio entorno... nuestra ciudad, nuestro país, nuestros barrios...
¿Qué situaciones de injusticia observas a tu
alrededor? es la pregunta que hoy me hago y te la hago a ti también. Porque sólo así, podremos encontrar los modos creativos de respuesta y es que
«Creer en Dios y en la gratuidad de su amor lleva a la
opción preferencial por el pobre, a la solidaridad con quienes sufren miseria y
con aquellos que el orden social desconsidera y despoja» (Gustavo Gutiérrez, Hablar de
Dios desde el sufrimiento del inocente).
Estos días he visto -con muchísima alegría y esperanza- que nuestras Hermanas, Asociadas(os), Misioneras(os) y Colaboradoras(es) de Misión lo están haciendo tangible... ¡Qué alegría es sentirme parte de algo mayor, sabiéndome vinculada a esas otras historias! Ellas y ellos, toda la familia CCVI está tendiendo redes con esos otros y otras. Gracias por esa construcción del Reino de Dios aquí y ahora en justicia y paz.
Leer más: Movilización por la justicia y contra la corrupción en Chimbote http://comisiondejusticiasocial.blogspot.com/2014/09/movilizacion-por-la-justicia-y-contra.html?spref=tw
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