Sembrando Semillas por el Cuidado de la Tierra

Todas las formas de opresión e injusticia están interconectados y se refuerzan mutuamente, Dios nos llama a compartir los motivos de nuestra esperanza. Desde la fraternidad más real. Por ello al reflexionar la Carta Encíclica del Papa Francisco, la oficina Internacional de Justicia, Paz e Integridad de la  Creación (JPIC) viene desarrollando el proyecto 'Vive Laudato Si' a través de diversas actividades ecológicas y formativas con la finalidad de ofrecer a agentes pastorales parroquiales un espacio para despertar, reflexionar y promover el respeto de la creación de Dios de manera íntegra y concreta.

‘Vive  Laudato Si’, promueve la relación de interdependencia, y compromiso con la casa común, oponiéndonos a la cultura del descarte, individualismo, codicia, exclusión y explotación. Desde la Laudato Sí, documento sobre el cuidado de la creación del Papa Francisco, convocamos a unir todos los esfuerzos por cuidar a nuestra hermana tierra que clama y no aguanta más.

Entre las actividades desarrolladas están:

Introducción a la Encíclica & Lo que está pasando en nuestra casa común,  a través de una metodología participativa que permitió a las(os) participantes expresar sus preocupaciones desde los cuentos de la Serie Laudato Si publicada por la REPAM (Red Eclesial Panamazónica).  Posteriormente se abrió al diálogo para abordar más los problemas, comprender sus causas y proponer posible soluciones y compromisos entre las(os) participantes de la Parroquia Señor de los Milagros en Comas.

El evangelio de la Creación, un foro que tuvo como invitados al teólogo Enrique Vega y la Hna. Mirella Neira; quienes nos compartieron sus intuiciones y nos llamaron a asumir la invitación del Papa Francisco a buscar la conversión ecológica que sea coherente con una cultura de la vida y la esperanza a la manera del Reino de Dios.

Porque como se lee en la Encíclica: ‘a la vez que podemos hacer un uso responsable de las cosas, estamos llamados a reconocer que los demás seres vivos tienen un valor propio ante Dios y, «por su simple existencia, lo bendicen y le dan gloria»[41], porque el Señor se regocija en sus obras (cf. Sal 104,31). Precisamente por su dignidad única y por estar dotado de inteligencia, el ser humano está llamado a respetar lo creado con sus leyes internas, ya que «por la sabiduría el Señor fundó la tierra» (Pr 3,19)’.

La raíz humana de la crisis ecológica & Una ecología integral, un cine fórum como puente para poder dialogar a fondo en las fronteras de la crisis medioambiental que amenaza la vida.  Noemí Depaz facilitó el espacio con el objetivo de motivar hacia una consciencia crítica sobre la importancia del cuidado de nuestra casa común, tomando como base al capítulo III y IV del Laudato SI. Así luego de Presentación e introducción en el tema, se presentó un corto (animación) por grupos, luego se abrió a reflexiones grupales, culminando con un diálogo abierto a todo el plenario.

Líneas de orientación, acción, educación y Espiritualidad Ecológica, un taller vivencial que ayudó a integrar compromisos y la espiritualidad que mueve a cada cristiana(o) a cuidar la Creación de Dios.  A través de las ‘Estaciones Planetarias’, las(os) participantes realizaron el compromiso de Vivir Laudato si desde el cuidado, protección y cariño con todo lo creado. Para culminar el espacio se hizo entrega de una planta como símbolo de un compromiso con la vida todos los días.

Viviendo Laudato Si, dirigido a jóvenes agentes pastorales . Con el apoyo de la Pastoral Juvenil de la Parroquia Reina de los Cielos en Los Olivos, compartimos una interpelante reflexión iluminada por la Encíclica del Papa Francisco ‘Laudato Si’ sobre el cuidado de la Casa Común. Damos gracias al teólogo Enrique Vega que facilitó el espacio y a toda la juventud que sigue buscando en palabras y gestos encarnar la Palabra hoy y aquí.

Cabe mencionar que este evento se realizó como sustento formativo ante ‘el mes de reciclaje’ en la comunidad parroquial porque 'no hay que pensar que esos esfuerzos no van a cambiar el mundo. Esas acciones derraman un bien en la sociedad que siempre produce frutos más allá de lo que se pueda constatar, porque provocan en el seno de esta tierra un bien que siempre tiende a difundirse, a veces invisiblemente. Además, el desarrollo de estos comportamientos nos devuelve el sentimiento de la propia dignidad, nos lleva a una mayor profundidad vital, nos permite experimentar que vale la pena pasar por este mundo'.

Agradecemos a las comunidades juveniles presentes e inspirarnos a comprometernos  a vivir nuestro 'ser cristian@s' cuidando la Creación de Dios.